Se acerca la fecha más «amorosa» del año, y vamos a usarla como pretexto para hacer actividades para afinar la motricidad con nuestros peques. Estos atrapasoles de corazón con papel de seda son una manualidad de San Valentín o por qué no, para hacer en cualquier momento del año, con niños de edad preescolar. Vamos a ejercitar la motricidad fina y el uso de las tijeras, y vamos a estimular la creatividad y el sentido de la vista.
Materiales necesarios
- Papel de seda de diferentes colores
- Tijeras para preescolar
- Folios plásticos
- Cola escolar
- Pincel
Paso a paso
- Vamos a preparar los materiales para la actividad. Cortamos los bordes del folio plástico, para obtener dos hojas de plástico separadas. Necesitamos 1 hoja para cada niño. Ponemos sobre la mesa de trabajo los papeles de seda, las tijeras, la cola en un recipiente, y el pincel. Protejemos la mesa con mantel plástico. Puede resultar más sencillo para los peques, si pegamos las hojas plásticas a la mesa con cinta de papel, para que no se muevan mientras trabajan.
- Pedimos a los peques que corten cuadraditos, o trozos pequeños, de los diferentes colores de los papeles de seda. Cuando tenemos una buena cantidad, podemos comenzar a pegar.
- Los peques irán pincelando la hoja plástica con la cola, e irán pegando cuadraditos de papel de seda, combinando los colores y superponiéndolos a gusto. Cuando han terminado de cubrir la hoja, dejamos secar muy bien la cola. Pueden hacer falta varias horas, incluso mejor de un día para otro.
- Una vez que la cola está bien seca, doblamos la hoja a la mitad con cuidado, con la parte donde está el papel de seda hacia adentro. Ahora cortamos la mitad de un corazón, de manera que al abrirlo tendremos un corazón completo. Este paso pueden hacerlo los peques si saben usar bien las tijeras, de lo contrario debe hacerlo un adulto.
- Cuando abriremos la hoja, el papel de seda se despegará solo de la hoja de plástico. Ahora podemos pegar nuestros corazones en la ventana usando celo de dos caras, y observarlos a la luz del sol.
Quién puede hacer esta actividad
- Niños de preescolar a partir de 2 años: aunque no sepan usar las tijeras, los peques pueden hacer esa actividad pegando trocitos de papel cortados con las manos. A partir de 3 años (aproximadamente), vamos a darles tijeras de seguridad para que comiencen a practicar.
Para qué sirve esta actividad
Con estos atrapasoles de corazón vamos a desarrollar la motricidad fina: vamos a practicar el uso de las tijeras, y realizar movimientos de precisión, como coger el pincel y los papeles con índice y pulgar a modo de pinza. También vamos a estimular el sentido de la vista con los colores y las transparencias: observando el papel de seda al sol veremos cómo se forman colores diferentes cuando se superponen dos papeles de colores distintos. Aprovechamos la observación para aprender sobre los colores: ¿qué sucede cuando se superpone un papel amarillo a uno rojo? La creatividad se incentiva con el uso libre del color y la forma, que los peques combinarán siguiendo su instinto creativo.